Entre los renos nuevos de Santa Claus, Rudolf no es el más rápido, elegante, fuerte o poderoso, pero es el que mejor orientará a todos sus compañeros durante la noches de ventisca.
Logró esta hazaña con su nariz llena de magia. Redonda y de color rojo, es capaz de emitir una luz brillante que ilumina el camino para Santa sin importar el clima.